“Los gérmenes no son la causa de la enfermedad, sino que buscan su hábitat natural -los tejidos enfermos-, de igual manera que los mosquitos buscan en agua estancada y putrefacta, pero no son la causa de la putrefacción del agua“.
Rudolph Virchow, padre de la Medicina Patológica, (1920)
Qué es lo que enferma nuestros tejidos entonces ?
El bioterreno es un término que usa la medicina biológica para describir el terreno biológico, nuestro líquido extracelular. Nuestras células están “bañadas” por él, se nutren y oxigenan a través de éste. Y si no está en óptimas condiciones las células no podrán nutrirse, oxigenarse y “limpiarse” como deben. Por lo tanto no podrán cumplir con sus funciones y sólo es una cuestión de tiempo que enfermen.
El “ensuciamiento” o acidificación de nuestro terreno biológico o bioterreno es la causa de lo que llamamos enfermedad.
Hipócrates fue en realidad el primero en hablar de él y el concepto fue tan útil que eminentes fisiólogos, bioquímicos y médicos como Bernard, Bechamp, Enderlein lo usaron en sus tesis e investigaciones.
Ellos nos transmiten la idea de que un terreno biológico sano propiciará la salud y un terreno biológico tóxico producirá una adaptación forzada del organismo que intenta repararse o sanarse. A ésta adaptación pasajera es la que llamamos síntoma o enfermedad. La cronificación de un estado patológico se produce cuando el sistema ya no tiene la “vitalidad” para autorepararse o adaptarse a la situación.
El desequilibrio del PH, 99% de las veces ACIDIFICACIÓN, está inducido o provocado por una gran cantidad de Cargas de Estrés (CE), que pueden ser físicas, químicas, emocionales, sociales etc. Todas éstas cargas son las que llevan el PH de nuestros sistemas hacia el lado de la acidez dejando el terreno abonado para la aparición de síntomas y luego ser éstos etiquetados con nombres de enfermedades por la medicina alopática.
